miércoles, 23 de febrero de 2011

sí, soy terrorista

Hoy me he encontrado con una "graciosa" situación, yo andaba despreocupada por la calle cuando de repente la llamada de la nicotina me ha llevado a encender un cigarrillo en plena calle a la luz del día, y así iba yo, amenazante por el mundo, piti en mano como quien lleva una granada en el bolso y no lo sabe, pero en breve me he dado cuenta que por poco no me coge la policía para encerrarme pues pasando por una calle atestada de gente las miradas de la multitud señalaban que alguna cosa no andaba bien. Mirando hacia atrás buscando al terrorista suelto he descubierto a quién miraba la gente al oír el comentario de una señora de edad avanzada "podrías apagar eso?Los jóvenes ya no respetáis nada", el tono no sé cómo transmitirlo pero dejémoslo en "poco agradable".
Desde ese momento la adrenalina corre mis venas cuando pienso en encenderme un cigarrillo, no sabía que tuviese tanto talento como terrorista pero he conseguido atemorizar a toda una calle, unas ocho personas.
Ahora me voy a causar más estragos en la vía pública, me voy a comer chicle con la boca abierta!!

lunes, 21 de febrero de 2011

Sonríe

Porque la vida son dos dias, y nos los pasamos con preocupaciones y con la cara larga.
Hay que disfrutar cada momento. Ser feliz es más sencillo de lo que muchos piensan, solo hay que buscar el lado bueno de las cosas, quitarle importancia a los problemas y SONREIR*.

domingo, 20 de febrero de 2011

~ autoengaño

  ..que una coca-cola te hace feliz, que Papá Noel existe, o que hay un ratón que se lleva los dientes que se te caen.. vivimos rodeados de afirmaciones que nos esforzamos por intentar hacer reales.. para sentirnos más seguros, porque estar aquí es difícil, y para escapar al miedo inventamos anclas a la felicidad..

Dios, justícia, igualdad, democracia.. cómo creer en ese tipo de cosas cuando despiertas?..
en el fondo todos sabemos que son mentira..  autoengaño, fruto del miedo

De todas maneras quien se preocupa y tiene miedo un domingo de tan agradable temperatura y sin nubes de lluvia?

sábado, 19 de febrero de 2011

Reyes Peña Villareal ♥



Una gran mujer, la vida de la cual no voy a contar porque no es necesario.. supongo que no conocía todo de ella, pero me hizo quererla y eso es lo que importa para mí, no necesito saber más que lo que descubrí..
  Poca gente tiene la suerte de haber tenido a una bisabuela como la mía, y digo poca gente porque tampoco somos muchos sus biznietos.
  Supongo que algunas cosas no es que se olviden, se aprende a vivir con ellas.. También supongo que no debe ser fácil aprender, o puede que a mí me cueste más aprender, pero duele un poco todos los días..
  Es "ley de vida", hay que resignarse y aceptar la vida tal y como viene, hay aspectos de ella que no dependen de nosotros, no dependen más que de la vida misma.. cuando pensé esto por primera vez sentí muchíssima impotencia, no es agradable aceptar que no se tiene el control de todo aquello que nos incumbe y nos afecta..

..sería tan agradable poder apagar el sol en los dias calurosos.. 
imposible.*

vacío sin gravedad

  Sábado noche, todavía en pijama aburrida y con pocas ganas de arreglarme más que de salir he decidido empezar este blog, no para que alguna persona que no tenga nada más que hacer me dedique unos minutos algún dia para leerlo, si no para tener algo que hacer.. algo con qué entretener esta cabecita que no para quieta un momento, supongo que hay por ahí varios ejemplares de mi misma especie, ellos saben de qué hablo. 
  Sinceramente, porqué cuando estamos mal tendemos a encerrarnos? El otro día lo discutía con un profesor, y me convenció por completo que cuando estamos mal, aunque no tengamos ganas de estar rodeados de gente, ni siquiera de hablar con algun amigo, realmente lo necesitamos. Estar solo lleva a hablar con uno mismo, y cuando se está mal y los pensamientos son destructivos se crea ese caos mental.. esa caída precipitada a un vacío sin gravedad en el cuál nos acurrucamos subsistiendo anímicamente hasta que ocurre algo, ese algo puede ser cualquier cosa, pero debe ocurrir por el bien de uno mismo.
Pero, es necesario esperar a caer para levantarse?
No. Así que a pesar del frío, de ese kilo de más, de la indecisión de no saber qué ponerme y del dichoso grano que se avista desde el cielo, voy a salir por la puerta dispuesta a sonreir, pase lo que pase.